“San Stefano Rotondo, cuyo nombre os da idea de su forma general, fue un templo erigido en honor del emperador Claudio. La primera iglesia consagrada a San Esteban fue construida por San Simplicio en el año 467. Pero en la relación escrita por este mismo santo, se encuentra a la vez la iglesia de San Esteban y el Templo de Claudio. Tened en cuenta que, en su tiempo, el año 467, la autoridad pública no permitía aún a los cristianos demoler y ocupar los monumentos públicos. Sólo en 772 pudo el papa Adriano I apoderarse del templo de Claudio y, sobre sus cimientos, hacer la iglesia que vemos. Nicolás V la hizo reparar en 1454; Inocencio VIII y Gregorio XIII hicieron reformas en ella.
Esta iglesia, de una forma muy singular, está decorada por cincuenta y seis columnas antiguas dispuestas en dos filas. Casi todas son jónicas y de granito; seis son de orden corintio y de mármol griego. En la pared interior de la nave están esas horribles pinturas…”
Palabras de nuestro autor el día 8 de julio de 1828. Páginas 358 y 359 de la edición mencionada.
Fotografía tomada de la galería de Clementi.